martes, 3 de julio de 2012

A LOS NIÑOS DE RÍO GRANDE, OAXACA


La semana pasada me invitaron a amadrinar a 97 niños y niñas que concluyeron el kínder… qué halago mayúsculo… Les comparto el texto que les leyeron en su cierre… Nomás, para seguir elogiando esa edad maravillosa de los cinco, seis años…

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Los días
de la infancia


Alegres los días de la infancia, etapa de la vida en que el mayor conocimiento se adquiere a través del juego, el canto... Mis queridos niños y niñas, nunca dejen de ser niños y niñas incluso cuando lleguen a la vejez, nunca dejen de ser niños y niñas. Ser niño no sólo nos salvará del aburrimiento, sino que resguardará la capacidad de sorpresa necesaria para despertar nuestra indignación ante la injusticia, el abuso, la intolerancia. Nunca dejen de ser niños ni niñas porque necesitamos su alegría que incentive la esperanza, la organización colectiva, la lucha por la igualdad y la democracia... Nunca dejen de ser niños y niñas porque esa edad, esa condición de infante es la única garantía para no perder las alas... Las alas de la imaginación, las alas de la fantasía, las alas de la creatividad, las alas de la actividad lúdica, las alas del juego...

Hoy, ustedes mis niños y niñas emprenden el vuelo a otra a otra escuela, tal vez a otro barrio, otra colonia, otro municipio... Y yo les quiero no sólo desear mucha alegría en este vuelo, sino deseo que sus ojitos, sus oídos, su olfato, su tacto y su gusto sean bien recibidos con imágenes, sabores, texturas, paisajes, compañías que siempre, siempre les recuerde los días felices del kínder y a sus maestras del preescolar que generalmente son las maestras más amorosas de toda nuestra formación. 

(Gracias maestras por sembrar en estos niños y niñas -que hoy emprenden un viaje importante- el gusto por la música, el cuento, el baile, la exploración, el juego, la lectura.... Ojalá sus ojos vean a estos niños y niñas crecer...)

Mucha suerte mis niños y niñas lindos y lindas... Mucha suerte en este viaje; nunca se olviden de mirar atrás y recordad alegres estos días de kínder, los más felices en nuestra formación profesional. Nunca se olviden de mirar atrás y mantener viva la memoria, esa memoria que nos salva de no morir porque en la alegría encontraremos siempre la esperanza de seguir avanzando, luchando y viajando... Nunca se olviden de mirar atrás, porque en el pasado se resguarda nuestra historia y en ésta, nuestra identidad.

A volar pues mis niños y niñas, a volar alto... a llenarse de sol, lluvia, mar, arena, tierra... ¡A llenarse de vida! Mucha suerte mis queridos niños y niñas y que este viaje al crecimiento nunca, nunca acabe... Mi abrazo fraterno, mi beso limpio para ustedes...

¡Hasta pronto, hasta siempre!! 


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Florina Piña Cancino es una mujer que se dedica a la promoción de la lectura, pero no sólo a la lectura de libros, sino de paisajes, texturas, rostros, espíritus, almas, cuerpos, olores, sabores... Tiene 41 años siendo niña y lo que más le gusta es escuchar cuentos y contar historias; Florina está convencida que en los libros y en la palabra de los otros está la vida y sus claves para no sufrir. 


Es directora del proyecto Cuenteros y Cuentistas, es profesora y tallerista universitaria y gestora cultural. 

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La escuela es “Juan Federico Herbart” ubicada en Av. 5 de Mayo s/n Col. Balbuena Río Grande, Villa de Tutepec. Juquila, Oaxcaca… Cuenta con 208, niños... distribuidos en 15 salones... Cada salón tiene su biblioteca de aula.... Hay 99 niñas y 109 varones... 
Agradezco enormemente el entusiasmo y la invitación de la maestra Fátima López y de la directora del kínder... 


También al centro Cultural de España que donó libros para los niños y al maestro de la ciudad de Oaxaca, Ignacio Rogelio Morales Sánchez quien apoyó para hacer realidad que los libros llegaran a sus destinatarios... Muchísimas gracias a todos los hacedores de sueños...


¡¡¡¡Salud y larga vida a estos chicuelos!!!


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